"No creo que la sociedad que he descrito en 1984 necesariamente llegue a ser una realidad, pero sí creo que puede llegar a existir algo parecido", escribía George Orwell después de publicar su emblemática novela. Corría el año 1948, y la realidad se ha encargado de convertir esa pieza entonces de ciencia ficción en un retrato magistral de nuestro tiempo.