El dibujo urbano es el arte de captar las esencias, la espontaneidad, la vida y el color de un instante... precisamente en el mismo instante. Pero ¿cómo atrapar en nuestro cuaderno de dibujo la escena que tenemos delante? Una de las mejores técnicas para lograrlo es la acuarela directa, que la prestigiosa pintora y acuarelista Marion Rivolier ha practicado y perfeccionado durante años y cuyos entresijos nos revela en este manual práctico. Solo se necesitan un pincel, una caja de acuarelas de doce colores y un cuaderno de dibujo. Aprenderemos a trabajar de forma intuitiva, con pinceladas sueltas y directas, a través de unos cincuenta ejercicios prácticos que van de lo simple a lo complejo: desde hacer paletas rápidas y mezclar colores, crear profundidad o expresar estructura hasta pintar escenas urbanas y de la naturaleza y conseguir efectos de movimiento, escenas nocturnas, multitudes humanas, andamios, tinglados, grúas... Sencilla o complicada, toda escena es un conjunto de masas de color, y el dibujante urbano puede expresar su esencia y su belleza con solo unas simples (y sabias) pinceladas.