Una noche, Raina se despierta sintiéndose mal del estómago. Su mamá también se siente mal, así que puede tratarse de un virus. Pero una vez que Raina regresa a la escuela, después de ponerse bien, siente que cada vez que tiene que enfrentar un problema -ya sea si sus amigas le hablan o no, si los chicos de su clase hablan de temas asquerosos, si tiene que hacer un proyecto escolar o si se está alimentando bien o no- le vuelve a doler el estómago. ¿Qué le pasa?
Una vez más, Raina Telgemeier nos brinda una historia encantadora y divertida que nos hace pensar sobre el coraje que se necesita para conquistar nuestros miedos mientras crecemos.