Bola ocho es un libro deslumbrante. Una obra maravillosa en la tradición de escritores como Raymond Carver y Dorothy Parker
Estos ocho relatos nos invitan a emprender un viaje por los contornos de la intimidad, que se van desplegando a través de varias ciudades y continentes. Desde un trayecto a dedo por el Véneto italiano hasta una caminata por un arrozal balinés oscuro como la boca del lobo, o la cola para pedir en un bar de Seattle lleno de gente, Geoghegan dispone a sus personajes sin rumbo en un mundo que asienta su lamento en el enigmático terreno del deseo. El cuento que da título al libro nos presenta a una joven y su hermano que, una vez llegados a la mayoría de edad, se abandonan a la inercia de una temeraria autodestrucción. Elizabeth Geoghegan, discípula de Lucia Berlin y compañera muy cercana durante sus últimos años, escribe con una prosa lírica y sin ambages mezclada con un realismo afilado y una aguda ironía.
«Si Lucia Berlin es una Patty Smith precoz, Geoghegan sería Blondie, Joan Jett y Florence and the Machine mezcladas en un mismo y generoso bocado».
Susan Bradley Smith