De manera consciente o inconsciente, todos los seres humanos buscamos la felicidad. Ésta parece ser un componente indispensable de la vida plena y la realización individual. En efecto: ¿de qué serviría ser mejores personas y encontrar el sentido de la existencia, si tales conquistas no estuvieran acompañadas de un sentimiento de dicha verdadera? Sin embargo, pese a ser tan deseable, resulta sorprendente lo poco que sabemos sobre esta aspiración.