MARTIN VON HILDEBRAND es reconocido a nivel mundial por su activismo en pro de la Amazonia y sus grupos indígenas, labor por la que ha sido merecedor de varios premios nacionales e internacionales, entre otros, el Right Livelihood Award, conocido como el Premio Nobel Alternativo. Este compromiso con las comunidades amazónicas se re monta a sus primeros años como antropólogo en la década del setenta, cuan do fue testigo de los estragos de las caucherías y las misiones evangelizadoras. Desde entonces ha trabajado de forma incansable para garantizar a los indígenas sus derechos ancestrales a la tierra y a ser reivindicados como colectividades con una organización social, política y cultural propia, dignas de ejercer un gobierno autónomo como pueblos. Esta visión ha sido la esencia que ha orientado las acciones de alguien que se identifica más como un facilitador que un protagonista, pero sin quien la historia de los pueblos indígenas amazónicos de Colombia sería muy distinta.
El llamado del jaguar es un libro de memorias fuera de lo común. Relata de forma vívida la travesía del autor por el Amazonas, mezclada con una especie de etnografía sin precedentes en la que el lector quedará atrapado por los mitos y descripciones de las comunidades, como si estuviera en medio de la selva, en medio del mambeadero, acogido por la gran maloca del conocimiento indígena.
"Lo que preocupa a Martin no es lo tradicional en oposición a lo moderno, sino los derechos de los pueblos libres a elegir los componentes de sus vidas. No tiene ningún interés en secuestrar a los pueblos indígenas en la selva, para congelarlos en el tiempo como si fuesen una suerte de especímenes de museo. Tras haber vivido y trabajado entre ellos duran te casi cincuenta años, conoce a los tanimuka, yucuna, letuama y maku na como amigos y parientes; hombres y mujeres comunes, complejos e inspiradores, con todos los desafíos y contradicciones que se encuentran en cualquier comunidad, en cualquier parte del mundo".
Del prólogo de Wade Davis