En el verano, la casa de los abuelos se convierte en un refugio divertido repleto de ingeniosos artificios. Pero cuando viene el otoño y los nietos se marchan, el azar hará que los niños estén presentes en cualquier estación del año.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información