RANDALL JARRELL / IL. MAURICE SENDAK
«Comenzaron a enseñarse palabras el uno al otro. Ella se tocaba la cabeza y hacía el mismo sonido, una y otra vez, hasta que el cazador lo aprendía de memoria
».
«Indudablemente el mejor en muchos años, una historia atemporal y universal». The New York Times
«Un cuento incisivamente hermoso para jóvenes o mayores, seguramente destinado a la inmortalidad». New York Herald Tribune Book Week