¿Qué justicia merecen los mayores enemigos de la humanidad? Parece insólito pero una vez terminó la Segunda Guerra Mundial, los soldados alemanes que se rindieron o terminaron presos no se sentían culpables. ¿Por qué si estaban cumpliendo las órdenes de luchar por su país? ¿Qué hacer con miles de capturados si no había tantas cárceles? ¿Debían imponerse penas colectivas o juzgar individualmente a cada uno? Aunque la barbarie era evidente, los llamados Juicios de Nuremberg tenían muchos vacíos jurídicos. Justamente de esto trata este gran libro que mezcla la historia, con la crónica periodística y con la reflexión sobre cómo el Derecho tuvo que inventarse formas para tomar decisiones en casos emblemáticos que no tenían las reglas claras para las partes. Lejos de ser un libro para abogados, los lectores se enfrentarán a una visión novedosa de ver la historia.
La disputa de Chevron contra Ecuador por el impacto ambiental, los juicios tras la guerra de los Balcanes, la discusión sobre el ron Havana Club -¿era de quien se inventó la marca o de Cuba?-, la historia de Oscar Wilde juzgado por su homosexualidad; o cómo juzgar a un pirata si su pecado no era dentro en su país, son ejemplos de cómo en la historia las leyes tuvieron repensarse. Quien lea este libro gozará de relatos apasionantes con el marco legal como trasfondo.