Nadie nunca miró un calendario vacío y dijo: "¡La mejor manera de pasar este tiempo es llenándolo de reuniones!" o se puso a trabajar por la mañana y pensó: "¡Hoy voy a pasar horas en Facebook! Sin embargo, eso es exactamente lo que hacemos. Por qué? En un mundo donde la información se actualiza sin parar y la jornada laboral se siente como una carrera para reaccionar a las prioridades de los demás más rápido, agotados y distraídos se ha convertido en nuestra posición por defecto. Pero, ¿y si el agotamiento del trabajo constante no fuera obligatorio? ¿Qué pasaría si pudieras bajarte de la rueda del hámster y empezar a tomar el control de tu tiempo y atención? De eso se trata este libro.