ANTONELLA BERDUGO / CINTHYA ESPITIA
En Marina, la sepulturera de algas, una niña de doce años barre y entierra las algas muertas que la marea arrastra hacia la playa. Su labor en la isla no es sólo de limpieza, pues enterrar las algas es también una manera de reconectarlas con el arrecife. Escrito con el paisaje pegado a los pies, este libro cuidadosamente ilustrado sumerge al lector en un relato marcado por la infancia, los saberes heredados y la aparición de unos extraños visitantes.