En sus últimos años de vida, Leonard Garner recordó la canción de un trompetista con ínfulas de adivino, un padre que robaba farmacias y una buhardilla en el jardín botánico de Birmingham, Alabama. Hasta su muerte, en las Islas del Rosario, mantuvo en secreto los motivos por los cuales decidió exiliarse en Cartagena de Indias durante más de una década. Un periodista, la cocinera de un bistró y un fotógrafo se ven envueltos en la búsqueda de su pasado mientras sus propias vidas adoptan rumbos imprevistos, donde la tragedia converge con la comedia. Esta, su primera novela, le mereció el Premio Nacional de Novela entregado por el Instituto de las Artes de Bogotá, IDARTES.