Se suponía que había una sola camiseta de poder en el mundo: la Strongboy, y que Olga la tenía. Por lo tanto, ella era la jefa de la pandilla y podía mandar sobre Sofía, Ana, Gabriel y hasta sobre el gato y las hormigas.Se suponía
Olga ordenó al gato que le trajese un helado de fresa y a las hormigas que le fabricasen una piscina, a Sofía que le diese una manzana y a Gabriel que caminase a cuatro patas.
Menuda sorpresa y tamaño enfado se llevó Olga cuando todos consiguieron su misma camiseta Strongboy en la heladería tan solo con comprar un helado de fresa. Ahora todos eran jefes y podían mandar, pero no tenían a quién.