Mientras escribo huye
aquello que no escribo
(se escapa por las grietas)
Cierro los ojos
y allá en el fondo veo
lo nunca escrito
vaciándose de mí
(concavidad de espejos)
Jamás sabré nombrar
la bruma de la infancia
el vacío del tacto
cómo aúlla la tarde del secreto
Esta mano que demanda escritura
se cubre de silencio
(¿cuánto hay de herida en el desprendimiento
o hueco
en lo indecible?)
«Vaciamiento», de Isabel Expósito