Jonathan Swift es el hombre que más lejos se aventuró en la temeridad de enfrentarse con sus congéneres y el más eximio artífice de la ironía en la historia de la literatura. En esta obra se reproducen los polémicos pensamientos acera de la cruel sociedad inglesa de su tiempo. Entre otros temas Swift reflexiona sobre la política, la corrupción, la pobreza y la locura.