En este libro, se presenta una investigación innovadora sobre la construcción de la subjetividad antioqueña en la primera mitad del siglo XX. A través de un análisis detallado de las prácticas discursivas y no discursivas de la época, el autor muestra cómo se configuró la noción de "espíritu antioqueño" como una forma de gobierno de sí mismo y de los otros.
La investigación se centra en la gestión empresarial y racial de la sociedad antioqueña, y cómo se utilizaron estrategias educativas y cívicas para promover la acumulación de capital material y humano. El autor utiliza una batería conceptual que incluye la noción de imitación de Gabriel Tarde y la noción de immunitas de Roberto Esposito, para analizar cómo se produjeron las regularidades sociales y cómo se configuró el control social.
A lo largo de cinco capítulos, el libro aborda temas como la ideología de la raza, la noción de trabajo, y la institucionalización del proyecto personal como un emprendimiento que obedecía a la lógica empresarial. El autor muestra cómo se creó una conexión emocional entre la población y los capitanes empresariales, y cómo se mantuvo el statu quo.