Tras la muerte de su madre, un hombre viaja, sin ánimos ni convicción, a un retiro en el Caribe. En medio del duelo, observa a las personas que lo rodean, sus excentricidades, y las nuevas y viejas prácticas espirituales con las que intentan sentirse mejor. Tal vez, entre los gestos más mundanos, él pueda encontrar un consuelo.